
Por:Gloria Consuelo Gómez Arango
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Hoy más que nunca el mundo necesita de nosotros como trabajadores de la luz, orando y pidiendo por la paz del planeta, nuestra misión es orar con toda la fe, visualizando los países en paz y prosperidad, es la mejor forma de poder ayudar a que las energías del universo se acomoden de forma exacta dentro de los planes perfectos del creador.
3 pasos para preparar tu oración por la paz del mundo
- Durante tu día habitual conecta tu alma con el mundo espiritual, visualizando y llamando a los ángeles y arcángeles, maestros y seres de luz.
- Cierra tus ojos y visualiza el planeta con la luz blanca de la paz llegando a cada país, a cada gobernante, a cada habitante.
- Siempre agradece al mundo celestial por escucharte y decir “Namasté” o “Hecho está”, con toda la fe que los seres celestiales te escucharán.
4 oraciones por la paz del mundo
Aquí te compartimos 4 oraciones muy concretas para pedir por la paz del mundo, que son originarias de grandes líderes espirituales y extractadas del blog católico de usccb:
1. Juan Pablo II
Oh, Dios, Creador del universo,
que extiendes tu preocupación paternal sobre cada criatura
y que guías los eventos de la historia a la meta de la salvación;
nosotros reconocemos tu amor paternal
que a pesar de la resistencia de la humanidad
y, en un mundo dividido por la disputa y la discordia,
Tú nos haces preparar para la reconciliación.
Renueva en nosotros las maravillas de tu misericordia;
envía tu Espíritu sobre nosotros,
para que él pueda obrar en la intimidad de nuestros corazones;
para que los enemigos puedan empezar a dialogar;
para que los adversarios puedan estrecharse las manos;
y para que las personas puedan encontrar entre sí la armonía.
Para que todos puedan comprometerse en la búsqueda sincera
por la verdadera paz; para que se eliminen todas las disputas,
para que la caridad supere el odio,
para que el perdón venza el deseo de venganza.
(Día Mundial por la Paz, 1 de enero del 2002)
2. Beato Juan XXIII
Señor Jesucristo, que eres llamado Príncipe de la Paz,
que eres Tú mismo nuestra paz y reconciliación,
que tan a menudo dijiste: “La Paz contigo, la paz les doy.”
Haz que todos hombres y mujeres den testimonio
de la verdad, de la justicia y del amor fraternal.
Destierra de nuestros corazones cualquier cosa
que podría poner en peligro la paz.
Ilumina a nuestros gobernantes
para que ellos pueden garantizar
y puedan defender el gran regalo de la paz.
Que todas las personas de la tierra
se sientan hermanos y hermanas.
Que el anhelo por la paz se haga presente
y perdure por encima de cualquier situación.
3. Papa León XIII
Oh, Señor, Tú ves como por todas partes
los vientos han estallado y el mar se convulsiona con la gran violencia de las olas crecientes.
Ordena, te lo pedimos, que calmes los vientos y los mares.
Restaura la paz entre nosotros,
esa paz que solo Tú nos puedes ofrecer
y restaura la armonía social.
Bajo tu mirada protectora y tu inspiración
puedan los hombres y mujeres volver al orden,
venciendo la codicia,
convirtiéndonos en lo que debemos ser,
reflejo del amor de Dios, de la justicia,
de la caridad con el prójimo,
haciendo uso ordenado de todas las cosas.
Haz que tu reino llegue.
Que todos puedan reconocer que están sujetos a Ti,
y que deben servirte, porque eres la verdad y la salvación;
que, sin Ti, todo lo que se hace es en vano.
Tu ley, Señor, es justa y paternalmente bondadosa.
Tú estás siempre a nuestro lado con tu fuerza y tu poder abundante
para ayudarnos.
La vida en la tierra es una guerra,
pero Tú ayudas al ser humano a conquistar lo que necesita.
Tú sostienes al débil y lo coronas con la victoria.
4. San Francis de Asís
Señor,
hazme un instrumento de tu paz:
donde haya odio, ponga yo amor,
donde haya ofensa, ponga yo perdón,
donde haya discordia, ponga yo armonía,
donde hay error, ponga yo verdad,
donde haya duda, ponga yo la fe,
donde haya desesperación, ponga yo esperanza,
donde haya tinieblas, ponga yo la luz,
donde haya tristeza, ponga yo alegría.
Oh, Señor, que no me empeñe tanto
en ser consolado como en consolar,
en ser comprendido, como en comprender,
en ser amado, como en amar;
porque dando se recibe, olvidando se encuentra,
perdonando se es perdonado,
muriendo se resucita a la vida.
Amén.
En Conociendo Tu Ángel estamos siempre conectados con lo que pasa en el planeta y cumpliendo la misión en meditación y oración con los ángeles y arcángeles, maestros y seres de luz, pidiendo y orando por la paz del mundo.